- La elección del corazón como símbolo “resalta intencionadamente ese compromiso con la ciudad, y propone materializar tales sentimientos en un elemento tangible que acompañe en la vuelta a todos aquellos que eligen Mérida como destino”
- El corazón es una pieza producida de manera artesana por la empresa emeritense Terracota Mérida que ha permitido la participación de vecinas y vecinos, artistas, colectivos sociales, quienes han participado en esta acción promovida por el ayuntamiento de Mérida
El Muro de los Deseos ya es una realidad. Esta acción promovida y costeada por el ayuntamiento de Mérida ya se puede visitar en el Museo Abierto, en su patio central. El alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, ha visitado esta instalación en el centro de recepción de turistas junto con el delegado de Turismo, Felipe González y la delegada de Urbanismo, Silvia Fernández.
“Es una acción global de participación ciudadana para dar visibilidad a los deseos de los ciudadanos y ciudadanas para su ciudad de las próximas décadas, y haciendo partícipes también a todos aquellos que la visitan”, ha destacado el alcalde quien ha recordado que se han instalado 500 corazones realizados y encargados a la empresa artesana Terracota Mérida, y en donde han participado, escribiendo su deseo, cientos de vecinas y vecinos, colectivos sociales y artistas locales.
Una obra compuesta por 500 deseos grabados sobre piezas cerámicas, “situada a la vista de todas y todos y recordándonos la importancia de construir juntos la ciudad que queremos”, incide Rodríguez Osuna.
La elección del corazón como símbolo “resalta intencionadamente ese compromiso con la ciudad, y propone materializar tales sentimientos en un elemento tangible que acompañe en la vuelta a todos aquellos que eligen Mérida como destino”. Es, por tanto, un elemento “llamado a convertirse de manera natural en el regalo corporativo del proyecto y en una invitación a seguir soñando esta ciudad”, ha subrayado ante los medios de comunicación Juanma Pérez Vinagre, artesano de la empresa encargada para realizar esta instalación.
El corazón es una pieza producida de manera artesana por la empresa emeritense Terracota Mérida, una firma con más de 30 años dedicados a aunar tradición y vanguardia alrededor de la cerámica. Cada corazón está fabricado en gres de alta temperatura y acabado con esmalte (con unas dimensiones de 140 x 130 x 75 mm. Aproximadamente); su disposición en el mural supone unas 9 piezas por metro cuadrado.
“Ha sido un proyecto ilusionante que permite la participación de vecinas y vecinos, artistas, ha estado abierto a quien ha querido participar con la promoción del ayuntamiento. Cada persona ha depositado su deseo en cada corazón del muro” explica Juan Manuel Pérez Vinagre que añade que “es una forma de dejar huella en la ciudad y servirá para potenciar la imagen de Mérida como signo distintivo”.
La instalación ocupa los dos muros laterales del patio interior del edificio, se ha planteado como la instalación principal de un espacio que aspira a convertirse en el principal receptor de turistas que visiten la ciudad. La instalación está financiada por el Ayuntamiento.
Antonio Rodríguez Osuna y Juanma Pérez Vinagre