- “Este libro viene a hablar también de la importancia histórica que tuvo Mérida en el conjunto del Imperio, pero también de la trascendencia que tuvo en el desarrollo de lo que eran los caminos romanos” indica el alcalde
- Como ha explicado Agustín Velázquez, “Mérida fue fundada por soldados veteranos que habían sido pagados en oro y plata tras 20 años de servicio y al no haber monedas fraccionarias para las compras diarias, el emperador permitió que la ciudad acuñara su propia moneda”
- La directora del MNAR, Trinidad Nogales, insiste en que este volumen refleje “la importancia de las colecciones numismáticas del museo emeritense y va a ser una referencia presente y futura para los investigadores” concluye Trinidad Nogales
El alcalde ha participado hoy en la presentación del libro La ceca de Augusta Emérita, catálogo de monedas en el Museo Nacional de Arte Romano, obra de los investigadores Agustín Velázquez y Rocío Sardiña. En este libro se ofrece el estudio de aproximadamente 650 monedas locales acuñadas en Mérida durante la época de Augusto y Tiberio.
Antonio Rodríguez Osuna ha destacado que “esas monedas acuñadas en Mérida en el siglo primero después de Cristo, y que eran de curso legal en el Imperio Romano, tienen como motivo el escudo de la puerta de Mérida que a día de hoy sigue siendo el escudo del Ayuntamiento de Mérida. Es decir, nuestro escudo ya estaba acuñado hace 2000 años en esas monedas romanas”.
Por tanto, “este libro que hoy nos presentan estos dos excelentes investigadores viene a hablar también de la importancia histórica que tuvo Mérida en el conjunto del Imperio, pero también de la trascendencia que tuvo en el comercio y en el desarrollo de lo que eran los caminos romanos” indica el alcalde.
Como ha explicado Agustín Velázquez, “Mérida fue fundada por soldados veteranos que habían sido pagados en oro y plata tras 20 años de servicio y al no haber monedas fraccionarias para las compras diarias, el emperador permitió que la ciudad acuñara su propia moneda”.
Un rasgo distintivo de estas acuñaciones” es que el motivo principal es la puerta de la ciudad, que se considera el emblema heráldico más antiguo de España”. El Ayuntamiento de Mérida sigue utilizando este escudo que se creó en el 25 a.C.
El estudio de estas monedas se remonta al siglo XVII, “pero su ordenación no estaba clara”. El catálogo propone una organización “basada en los dos grandes bloques de acuñación uno para la época de Augusto (desde el 25 a.C. hasta su muerte en el 14 d.C.) y otro para la época de Tiberio (desde el 14 d.C. hasta el 37 d.C.)” indica Agustín Velázquez, jefe del Departamento de Documentación del Museo Nacional de Arte Romano (MNAR).
Dentro de estos bloques, hay subdivisiones basadas en decisiones políticas o conveniencias de los ciudadanos de Mérida y los tipos de monedas incluían monumentos como templos y altares, que sirven como una fuente importante de información para los arqueólogos.
“La moneda de Mérida tuvo tanto éxito que se expandió por toda España, encontrándose ejemplares en diversos yacimientos y se considera la moneda local que más se acuñó en la península” añade el autor que resalta que “todo lo representado en las monedas, ya sean letras, palabras u objetos, tiene un significado estudiado, aunque en ocasiones, después de 2000 años, se ha perdido la clave para interpretarlo”.
Por su parte, la directora del MNAR, Trinidad Nogales, insiste en que este volumen refleje “la importancia de las colecciones numismáticas del museo emeritense y supone el culmen de una labor de trabajo de Agustín Velázquez como responsable científico del área de numismática del museo”. Gracias a él “se han podido comprar numerosas colecciones a través de la Junta de Calificación del Ministerio de Cultura, con lo cual el monetario del Museo Nacional de Arte Romano hoy en día tiene una representación importantísima de todas las series, con particular incidencia en las emeritenses”. Este catálogo “va a ser una referencia presente y futura para los investigadores” concluye Trinidad Nogales.
Antonio Rodríguez Osuna, Agustín Velázquez y Trinidad Nogales: