Antes de la apertura de las piscinas municipales ha sido necesario realizar una serie de actuaciones debido a la ausencia, en la mayoría de los casos, de falta de mantenimiento y conservación.
El gasto aproximado que ha debido hacerse en suministro e instalaciones, tanto en electricidad como fontanería o reparaciones varias, ha ascendido a 6.800 euros.
En cuanto a mano de obra municipal, han sido un total de 330 horas de trabajos de oficial y 220 horas de operario, que ascienden a un valor de 11.000 euros, que habría que haber desembolsado en caso de contratación externa.
El montante necesario para la puesta en marcha de las piscinas ha sido de 17.800 euros.