- Se trata de la primera vez que un Sumo Pontífice participa en un acto de Semana Santa fuera de la ciudad de Roma con un videomensaje dirigido a los y las cofrades en particular, así como a la ciudad de Mérida en general.
- “Ciudadanos de Mérida, hay alguien en Roma que hoy quiere estar presente entre vosotros. Un auténtico honor, un privilegio para esta ciudad que siempre será recordado. Santo Padre, para usted la palabra en este pregón…” así lo ha anunciado la Pregonera.
- En una intervención de casi cinco minutos, Francisco ha dado las gracias por “permitirme formar parte del Pregón de vuestra Semana Santa, única en el mundo, porque muy pocas ciudades pueden revivir estos días que cambiaron la historia de la humanidad en escenarios de más de 2.000 años de antigüedad, contemporáneos a los que Cristo sufrió la pasión”.
Toda una sorpresa en el Pregón de la Semana Santa de Mérida que ha pronunciado, en la Basílica de Santa Eulalia, la corresponsal de Cope en Italia y la Ciudad del Vaticano, Eva Fernández cuando, en un momento de su disertación ha anunciado “ciudadanos de Mérida, hay alguien en Roma que hoy quiere estar presente entre vosotros. Un auténtico honor, un privilegio para esta ciudad que siempre será recordado. Santo Padre, para usted la palabra en este pregón…”
En ese momento, en los monitores que se habían colocado estratégicamente en ambos lados de la Basílica, ha aparecido el Papa Francisco que, en primer lugar ha agradecido el “permitirme formar parte del Pregón de vuestra Semana Santa, única en el mundo, porque muy pocas ciudades pueden revivir estos días que cambiaron la historia de la humanidad en escenarios de más de 2.000 años de antigüedad, contemporáneos a los que Cristo sufrió la pasión” tratándose de la primera vez que un Sumo Pontífice ha participado en un acto de Semana Santa fuera de Roma.
Durante unos cinco minutos, Francisco ha destacado algunos aspectos de la importancia de la ciudad de Mérida en el Cristianismo, “ustedes se encuentran también en pleno AÑO JUBILAR EULALIENSE, con el que honran la figura de la niña mártir Santa Eulalia, cuyo culto convirtió a Mérida en cuna del cristianismo hispano y destino de peregrinaciones a lo largo de la historia”.
Ha recordado la visita que realizaron el arzobispo, Celso Morga, el alcalde, Antonio Rodríguez Osuna y el presidente de la asociación de Santa Eulalia, Luis Miguel González “vinieron a Roma para explicarme todos los proyectos que están poniendo en marcha en este importante año jubilar”.
Ha querido también, el papa, referirse a la juventud cofrade emeritense “Queridos hermanos y hermanas emeritenses: rezo por ustedes, especialmente por las familias que tienen algún ser querido enfermo, por los que se encuentran solos, por los necesitados, por quienes pasan apuros económicos, y también por los jóvenes, que sois el presente y el futuro de las Cofradías de Mérida”.
Al finalizar la intervención del Papa, con un sonoro aplauso en la abarrotada Basílica de Santa Eulalia, la pregonera le ha agradecido el “haber entrado en la historia de la Semana Santa de Mérida. Gracias por habernos dedicado este tiempo, y por tener a Mérida en su corazón”.
Eva Fernández, que ha recordado en su pregón que el pasado año se autoproclamó “Embajadora de Mérida en el Vaticano” ha continuado su pregón marcando un paso firme en la Basílica que “huele a memoria macerada durante siglos por la fe y el sacrificio de los primeros cristianos. Adentrarse por los laberintos de lo que fue la antigua basílica paleocristiana, detenerse ante los símbolos por los que daban la vida, invita a replantearte lo cómodo que resulta ovillarse en un rincón cuando descubres que matar por odio a la fe, sigue tan vigente como en tiempos de Nerón, Domiciano, Trajano o Diocleciano”.
Eva Fernández ha hecho un paralelismo entre las madres que viven las guerras actuales y que “han hecho que hoy en día el mundo esté lleno de madres con la mirada perdida. Ojos que narran miedo y ausencias en medio de la angustia pastosa, densa e inerte de todos los conflictos. Madres con una determinación inquebrantable, porque ellas nunca se rinden si hay hijos delante. Madres que mantienen la barbilla alta, la mirada dura, la misma que hemos visto en todas las que cruzan fronteras aferradas a sus hijos_… y un largo etc para pedir que “nunca seamos parcos en los agradecimientos a una madre, porque llegará el momento en el que no podremos dárselos más”.
La pregonera ha recordado e hilado a todas las hermandades y a toda la imaginería de la ciudad en un texto plagado de anécdotas de viaje pontificios y de su propia experiencia hasta finalizar alentando a las hermandades a dejarse “sorprender por la novedad que sólo Cristo puede dar y expresa, siente, reza y vive la alegría del Resucitado. Sal a los caminos para anunciar que el sepulcro no ha tenido la última palabra. Es hora de convertirse en testigos, honrando a quienes ya no están aquí y tanto echamos de menos. Proteged vuestra Semana Santa tal como hicieron vuestros mayores. Nazarenos, Cofrades, Hermanos: ¡Mérida os está esperando!”, ha concluido.
En su intervención tras el pregón, el alcalde, Antonio Rodríguez Osuna, ha manifestado a la pregonera que “cuando el año pasado te proclamaste Embajadora de Mérida en la ciudad eterna, ya era consciente de que ibas a ejercer y a cumplir con creces con esta ciudad que siempre te acoge con los brazos abiertos”.
Por ello, ha agradecido “este regalo que nos has hecho esta noche con tu pregón porque es impagable. Por nada en el mundo hubiera imaginado, y creo que todas y todos, que traerías a tu pregón al propio Santo Padre con ese mensaje, cargado de fuerza, hacia la ciudad de Mérida, afirmando, además, que nuestra ciudad es la Cuna del Cristianismo Hispano, algo que venimos reivindicando durante años y por cuyo reconocimiento seguimos trabajando”.
Ha señalado Osuna que “el Papa acaba de entrar, de tu mano, en la historia de la ciudad de Mérida, algo impagable sabiendo que, en la historia, ningún Sumo Pontífice ha participado en un acto de Semana Santa fuera de la ciudad de Roma”, al tiempo que ha pedido a Eva Fernández que le traslade al Papa “nuestro agradecimiento y que, por supuesto, Mérida y su figura quedan unidas para siempre”.
Por último, el alcalde le ha agradecido “este fantástico pregón cargado de emeritensismo y tan lleno de mensajes positivos, un pregón para tomar nota, para aprender y darnos cuenta que muchas veces, no nos fijamos en lo que tenemos alrededor, sino en lo nuestro”.
Papa Francisco: