- Es una reflexión interpretada en voz alta, a corazón abierto y con el alma desnuda, para transmitir estos dos conceptos opuestos o complementarios que marcan la vida
- Los intérpretes narran sus propias historias personales mediante la danza y sus capacidades artísticas diversas y el lenguaje de sus cuerpos únicos en escena.
- “Será la segunda de las representaciones de nuestra programación de cultura inclusiva; una obra en la que los protagonistas son personas con diferentes capacidades” señala la delegada de cultura, Silvia Fernández
Gozo y llanto de la compañía José Galán, “será la segunda de las representaciones de nuestra programación de cultura inclusiva; una obra en la que los protagonistas son personas con diferentes capacidades” señala la delegada de cultura, Silvia Fernández.
Se representará el sábado, 4 de junio, en el Templo de Diana, “con ella seguimos dando pasos en nuestro II Plan de Inclusión con una cultura para todos que consiste no solo en eliminar barreras arquitectónicas sino también dando oportunidades a personas con diversidad funcional para que sean ellos los protagonistas de las actividades que se organizan en la ciudad”.
Como invita a descubrir el título del espectáculo, cuenta con las dos emociones primarias del ser humano: gozo o el placer de la felicidad y llanto o el dolor del sufrimiento. Es una reflexión interpretada en voz alta, a corazón abierto y con el alma desnuda, para transmitir estos dos conceptos opuestos o complementarios que marcan la vida. Los intérpretes narran sus propias historias personales mediante la danza y sus capacidades artísticas diversas y el lenguaje de sus cuerpos únicos en escena. Carmen Caro, Rocío Cuadrado, José Galán, Concha García, Lola García-Baquero y Manuel Pérez son los protagonistas.
La Compañía José Galán de Flamenco Inclusivo nace en 2010 con el propósito de acercar, promover y difundir el flamenco y las artes escénicas entre los colectivos más desfavorecidos, los cuales no tendrían acceso a esta formación por ningún otro medio debido a su diversidad. Es pues pionera e innovadora en la creación de un flamenco accesible (inclusivo) a cualquier artista sin importar edad, etnia, género o capacidades físicas y/o intelectuales.
Silvia Fernández, delegada de cultura: