El alcalde Antonio Rodríguez Osuna, la subdelegada del Gobierno Pilar Nogales el director del Museo Nacional de Arte Romano José María Álvarez y el comisario José Luis de la Barrera, han inaugurado la exposición Arrecifes del tiempo. Arqueología, fotografía y literatura en Mérida, que pretende mostrar a los visitantes la incidencia que el paso del tiempo ha tenido sobre los monumentos emeritenses y sobre la propia ciudad que los acogió y que aprendió a convivir con ellos, que permanecerá abierta hasta el 31 de diciembre.
La línea de tiempo del discurso expositivo comprende desde los testimonios literarios más antiguos de los que se tiene constancia (s. IV d.C.) hasta la contemporaneidad.
Fotografías a gran escala de monumentos emeritenses, piezas arqueológicas de la colección del M.N.A.R. y documentos históricos entran en fluido diálogo para mostrar al visitante la incidencia que el paso del tiempo ha tenido en el conjunto monumental de Mérida, modificando sustancialmente su fisonomía externa o, en el peor de los casos, haciéndolo desaparecer parcial o totalmente.
La exposición se divide en cinco bloques temáticos, el primero dedicado al siglo XVII (de poesía y ruinas); el segundo a la desolación de la memoria, con los testimonios literarios de cinco viajeros e historiadores: Elio Antonio de Nebrija, humanista; Bernabé Moreno de Vargas, cronista de la ciudad en el siglo XVII; Antonio Ponz, viajero ilustrado; Mariano José de Larra, escritor romántico y Tomás Rabanal Brito, periodista; el tercer bloque sobre recuperando el esplendor perdido, con óleos y esculturas de los principales protagonistas que hicieron posible la recuperación del patrimonio arqueológico emeritense a partir de finales del siglo XIX y, por otra, documentos gráficos que muestran las vicisitudes a las que se vieron sometidas alguno de los principales monumentos emeritenses.
El bloque cuarto desvela las arrugas de la vieja ciudad, con fotografías de gran formato, que permiten apreciar la magnificencia y espectacularidad de determinados monumentos de la ciudad; y el bloque quinto sobre los monumentos como escenario, sobre la puesta en valor de los restos que habían pervivido a las injurias del tiempo y se habilitaron para dotarles de idéntica función a la que tuvieron, caso del Teatro, de cuyo Festival Internacional se muestran documentos originales de las primeras representaciones, o el ‘Pórtico del Foro’, que fue objeto de atención hace ahora 20 años, de un singular proyecto que llevó por título «Nundinae», la actual Emerita Lvdica.
Para la exposición se ha realizado un video que resume el contenido de la misma y lo amplía convenientemente, intercalando imágenes antiguas y planos actuales de la ciudad, en una perfecta simbiosis.