La delegada de Servicios Sociales, Catalina Alarcón, ha realizado esta mañana un balance de todas las actuaciones que se han llevado a cabo en la delegación a lo largo de 2018. “Cifras que a veces resultan frías y que son todo lo contrario al trabajo que se realiza diariamente en la delegación de Servicios Sociales, directo con las personas, especialmente a los más vulnerables que son los que más nos necesitan” ha destacado Alarcón.
Para paliar la situación en la que se encuentran muchos vecinos se pusieron en marcha varias medidas, algunas nuevas y otras que ya venían desarrollándose como los Mínimos Vitales, Fondo de Garantía Social, Renta Básica, Ayuda de Material Escolar, Ayudas a Asociaciones para productos perecederos con motivo de la Navidad “para combatir casos de pobreza que iban incluidas en nuestro programa electoral”.
Aunque es difícil hacer un cómputo de las personas atendidas en la Delegación, se ha hecho un cálculo que se estima en torno a las 14.500 personas entre todos los programas y servicios de la delegación como es Ayuda a Domicilio, Servicio de Atención, Programa de Familia, etc. Respecto a las Rentas Básicas, se tramitaron 880, produciéndose una disminución del tiempo de espera en la tramitación y ésta puede hacerse durante todo el año.
Los mínimos vitales (Luz, agua y gas), “que es la que cumple una de nuestras prioridades como es la lucha contra la pobreza energética”, con una inversión de 277.500 euros, de los que se beneficiaron 662 familias emeritenses y en las que Mérida se convirtió en la ciudad que más ha invertido en este concepto. Se presentaron, del 1 de febrero al 30 de noviembre, 3483 solicitudes “de las que más de 2.555 fueron favorables, es decir, un 75%”.
Respecto al Fondo de Garantía Social “nuevo recurso que se puso en marcha el año pasado, concretamente el 1 de octubre, con fondos propios para cubrir ayudas urgentes de carácter extraordinario” se han presentado 240 solicitudes y se han beneficiado 235 familias con una inversión municipal de 77.000 euros. Esta ayuda cubría diferentes necesidades, el 40% para adquisición de electrodomésticos de primera necesidad, otro 40% para necesidades básicas y beneficio del menor, y el resto destinada a la adquisición de medicamentos que no entran en la Seguridad Social y productos ortopédicos.
Otra ayuda que se puso en marcha en 2018 fue la ayuda a Asociaciones y Organizaciones para la compra de productos perecederos con motivo de la campaña de Navidad “queríamos que las asociaciones pudieran ayudar a las familias con productos perecederos y navideños para las fiestas”. Se han beneficiado 15 asociaciones que han atendido a unas 800 familias con un presupuesto de 16.000 euros.
También se puso en marcha en junio el “Programa de Atención a Familias” atendiendo a 39 familias en el propio domicilio y el seguimiento a las mismas. Además, en verano, se pusieron en marcha dos espacios educativos saludables para menores en los colegios Dion Casio y Antonio Machado en los que participaron 60 menores. Desde la propia delegación se realizó un campamento con pernocta para 590 niños de familias en riesgo de exclusión en Barcarrota “para muchos de ellos fueron sus únicas vacaciones y la primera vez que salían de su casa y de la ciudad”.
La Ayuda de Material Escolar, en la que las trabajadoras sociales revisan los expedientes, se presentaron 737 solicitudes y fueron aprobadas 487 con una inversión de 20.000 euros.
El Servicio de Ayuda a Domicilio atiende a más de 400 usuarios, y 250 terminales de TeleAsistencia adjudicados, con una financiación anual de 30.000 euros anuales gestionados por Cruz Roja.
Gracias a un convenio con Diputación de Badajoz “se van a comenzar a instalar detectores de humo en 100 viviendas de nuestros mayores de manera gratuita, para prevenir casos como el de ayer en nuestra ciudad”. Ya se han facilitado los datos de las viviendas donde se van a instalar y la Diputación será la que contacte con ellos.
Declaraciones de Catalina Alarcón: