- Este programa está dirigido a toda la población y sigue la línea del programa que, con este mismo objetivo, se puso en marcha el curso pasado.
- Surge porque el absentismo escolar es una de las competencias sobre las que las corporaciones locales tienen competencias.
La delegación de Educación vuelve a poner en marcha un programa de prevención del absentismo escolar que tendrá tres pilares: el propio alumnado, la familia y el centro educativo.
El objetivo, según señala la delegada, Susana Fajardo, es “diseñar intervenciones individualizadas que abarcarán desde el apoyo escolar para evitar que el alumnado se distancie y pierda el interés, hasta un servicio de capacitación y formación para el empleo, para las familias que lo necesiten, pasando por formación familiar e intervención en el entorno, así como seguimiento de los casos para poder diseñar formaciones y estrategias que ayuden a enfrentar situaciones conflictivas y que les proporcione herramientas de comunicación”.
Este programa está dirigido a toda la población y sigue la línea del programa que, con este mismo objetivo, se puso en marcha el curso pasado. Para acceder al programa o consultar se pueden poner en contacto con educacion@merida.es o 924380167.
Fajardo recalca que, desde el Ayuntamiento de Mérida, “apostamos por una equidad en las oportunidades y en la necesidad de abordar el absentismo desde una perspectiva que abarque todos los ámbitos que influyen en la asistencia o no del alumnado al centro educativo”. El derecho a la educación en un derecho que pertenece al propio alumno, independientemente de la edad o condición, y las familias y las administraciones debemos ser garantes de ese derecho evitando que sea vulnerado.
Este programa surge porque el absentismo escolar es una de las competencias sobre las que las corporaciones locales tienen competencias. Fajardo explica que, tradicionalmente, desde el ámbito, sobretodo de los servicios sociales, “hemos venido trabajando en la evaluación y el seguimiento de los casos que, por su gravedad, han dado lugar a la apertura de un expediente y a su seguimiento por la comisión de escolarización, pero es un tema que consideramos que necesita ampliar su abordaje por distintas circunstancias”.
Una de ellas es que, al absentismo tradicional, se está sumando un nuevo perfil de alumnado absentista, adolescentes que, teniendo edad para acudir de forma autónoma al instituto, han adquirido unos hábitos poco saludables de sueño y descanso, habitualmente por el uso de dispositivos electrónicos hasta altas hora de la madrugada, y que aprovechando la salida de sus progenitores a su trabajo, no acuden al centro educativo o faltan sistemáticamente a las primeras horas.
Susana Fajardo, delegada de educación:
